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HISTORIA 3

Después de la llegada de los Hermanos Maristas a Colombia desde Francia en el año de 1889 y ante la necesidad de centros educativos en la ciudad de Pasto, el Obispo “Monseñor Manuel José de Cayzedo” informado de los buenos resultados en educación que estaban logrando las instituciones Maristas en Popayán, Cali y Santander de Quilichao, gestiona ante autoridades eclesiásticas de Popayán solicitudes para que la comunidad Marista llegue a nuestra ciudad. Fue así como en marzo de 1893 los Hermanos Pedro Claver y Liberato llegaron a Pasto para acordar todos los aspectos de la fundación, mas tarde entre agosto y septiembre se unieron los Hermanos: Armancio, José Celso, Berilo, Cristino, José Hermond, Polimio, Jovito, Corinto, Paulino, Genaro, Juan de Dios, Faustino y Alberto; los pormenores del viaje entre Popayán y Pasto, tenían una duración de diez días de vicisitudes. La recepción fue apoteósica con demostraciones de afecto y simpatía. En noviembre del mismo año ...

En Junio de 1896 se posesionó como obispo de la ciudad Monseñor: Fray Ezequiel Moreno Diaz quien llegó desde España y brindó total apoyo a la obra Marista. Entre 1899 y 1902 se sufrió los sangrientos episodios de la guerra de los Mil Dias, donde cruelmente se reclutaron a niños y jóvenes para las sangrientas contiendas. Los centros educativos fueron adaptados como cuarteles y sufrieron el deterioro de las sucesivas acciones bélicas; la Escuela Santo Domingo pese a que resistió físicamente los combates y pleitos de los enfrentamientos, no pudo eludir las consecuencias económicas de esta conflagración entre ciudadanos. En 1904, mediante la ley 1 de ese mismo año, se nombra Nariño como departamento de Colombia con capital la ciudad de Pasto y su primer gobernador: Julian Buchelli Ayerbe, quien además fundó la Universidad de Nariño y su liceo; impulsando la educación en la región.

En octubre de 1912, el Boyacense Leonidas Medina empezó a ejercer como obispo de Pasto y tuvo varias divergencias con la Comunidad Marista, proponiendo renovaciones en el contrato sobre el funcionamiento de la escuela Santo Domingo con clausulas que le quitaban total autonomía a la Comunidad de Hermanos. En 1916 estando como director de la Escuela el Hermano Josías León, se realizaron unas obras en el recinto sin su autorización e inmediatamente las desaprobó. El Hermano Acacio provincial en ese entonces, recibió una carta del obispo Leonidas Medina que se quejó del proceder del Director de la escuela contra el obispo, el gobernador del momento Francisco Albán Paz y los Jesuitas, agregaba en su misiva que se retire al Hermano como director. El asunto después de pasar por varios términos, concluyó con el cierre de la Escuela Santo Domingo el 30 de noviembre de 1916, que en ese entonces contaba con 800 estudiantes y había prestado el servicio educativo para los niños de ...

Los Hermanos Maristas, decidieron encauzar la iniciativa de crear un plantel de carácter privado en la ciudad de Pasto, para realizar este propósito se designó los Hnos Genaro, Ignacio Bartolomé, Eutiquiano, Eduardo Clemente y el Hno Josías como rector, el colegio se denominaría: El Liceo de la Inmaculada (Años después cambió el nombre a Instituto Champagnat). Para ese momento se trasladó a la ciudad de Bogotá el obispo Leonidas Medina, y fué asignado en Pasto el Monseñor Aristides Gutierres quien concedió autorización eclesiástica para el funcionamiento del Liceo. Para el inicio de labores se usó las instalaciones de una casa esquinera grande del señor Leonidas Villota ubicada entre la calle 20 y carrera 24. En el comienzo se matricularon 60 estudiantes, en el segundo periodo lectivo ascendió a 100 y así creció sucesivamente. En febrero de 1918 fue asignado en Pasto el Obispo Antonio María Pueyo que en comienzo tuvo buenas relaciones con los Hermanos y ofreció ...

Transcurría un momento crítico para los Maristas, relacionada con las instalaciones del Liceo, pero Dios siempre estuvo con su bendición y fue ahí cuando el señor Nestor Villota Z. donó unos terrenos de buena extensión para que ahí se construya las instalaciones del Liceo, por otra parte, la señora Barbara de Eraso ofreció inmediatamente toda la madera que se necesite para la construcción con el fin de que la obra no presente demoras. Desde la dirección Provincial en el año de 1921, se encomendó este proyecto al Hermano Bernardo Calanique, quien se caracterizaba por su gran ingenio y paciencia en estos menesteres. Fueron jornadas arduas y sin descanso donde el hermano Bernardo demostró tenacidad, cargando vigas y grandes piezas de madera por caminos difíciles y recorriendo largas distancias, dirigiendo peones, azuzando bueyes, atendiendo todo entre el barro y la lluvia. En el año de 1923 cuando la obra estaba casi terminada, los Hermanos decidieron desocupar la casa ...

- Hno José Bolaños Rodríguez, Rectoría 1921 - 1924. Nacido en Cumbal (Nar); Inauguró las instalaciones propias donde incrementó el número de estudiantes y para el año de 1924 proclamó la primera generación de bachilleres del Liceo de la Inmaculada, donde se graduaron 14 estudiantes.
- Hno Anacleto Court, Rectoría 1924 - 1930. Dr en Filosofía y Letras, docente por varios años en Estados Unidos y centro América; realizó varias obras dotando aulas, oficinas, comedores y restaurantes, laboratorios para física y química; Internado del Liceo, fundó el pabellón infantil, Inauguró el salón de actos, la capilla, con la ayuda del Hno Pedro María concretaron el estadio, una imprenta institucional y trajo desde París un proyector de cine con diversas películas de ciencia, historia, tecnología, guerras mundiales, etc.
- Hno Heriberto, Rectoría 1930 - 1931. Dr en Filosofía y Letras, ejerció la docencia en España, Guatemala, El Salvador y Colombia; En el Liceo de la ...

Desde su segundo periodo como rector del Liceo de la Inmaculada, el Hno Bautista inició planes para llevar a cabo un ambicioso proyecto para construir grandes edificaciones, con numerosas aulas, escenarios deportivos, biblioteca, teatro, capilla, y todas las condiciones que se requerían para brindar los mejores espacios educativos a niños y jóvenes estudiantes del Liceo que cada vez crecían en número. Para este gran propósito hubo muchas dificultades principalmente no contar con el presupuesto de la obra, pero el Hno Bautista poseía mucha tenacidad e intrepidez y no se dejaba intimidar ante las adversidades, se decía que tenía carácter de acero; y se propuso dos metas iniciales: conseguir un buen terreno y encontrar un comprador para las instalaciones del Liceo.